enero 30, 2012



" […] Recuerdo la impresión que me hizo el encontrar, al revolver entre papeles, una hoja vieja y rasgada en la que yo misma había garrapateado unos versos hacía mucho tiempo, en Finlandia, durante las blancas noches de verano, sumergidas en su mágica claridad":

  
Tú, claro cielo sobre mi cabeza,
A ti quiero confiarme:
¡No permitas que el placer y el padecer
Me obstruyan aquí la visión!
Tú que te extiendes por encima de todo,
Por las llanuras y los vientos,
Muestrame el camino que tanto anhelo
Para volver a encontrarte.
Del placer no quiero su final
Ni el padecer rehúyo;
Sólo una cosa quiero: espacio y sólo espacio
Para arrodillarme debajo Tuyo.

Lou Andreas-Salomé




3 comentarios:

etcétera dijo...

"¿Vas a ver mujeres? No olvides el látigo",escribió Nietzsche en Zaratustra,posiblemente a causa del rechazo que sufrió por parte de L. Salomé.

Unknown dijo...

jajajja xke le dio lo suyo, esta mujer tiene una fuerza imponente!

Cristina dijo...

"Muestrame el camino que tanto anhelo
Para volver a encontrarte."